No te quemes… ¡broncéate!

Costa de Valencia, Playa de Gandía, dos mujeres y un hombre después de meses de cautiverio en la ciudad, se disponen a disfrutar de un fin de semana playero. Resultado; dos heridos leves, él con eritema solar a parches por todo el cuerpo (como si le hubiera atacado “Lobezno” en plena playa), ella con eritema intenso en hombros, nariz y frente con su posterior “pelado” tres días más tarde. Sin embargo, la tercera persona disfruta de un ligero, pero más duradero bronceado, sin ninguna zona pelada y sin incómodos picores en la piel.

¿Que hizo diferente esta última?

Solo con unos pequeños cambios en nuestros días de sol, protegeríamos de manera más eficaz el órgano más grande del cuerpo humano, la piel (en personas adultas ocupa aproximadamente 2 metros cuadrados y pesa 5 kilogramos).

Por casi todos es sabido que el protector solar multiplica el tiempo que podemos exponernos a la luz solar sin riesgo de quemaduras, con lo cual un protector con SPF15 no es menos eficaz frente a otro de SPF50, pero si durante más tiempo, con lo cual para un día entero bajo el sol, no te la juegues y apuesta por el más elevado.

Otro pequeño cambio que nos ayudara a proteger la piel de quemaduras, es darnos la crema antes de salir a la calle, lo primero, porque nos vamos a aplicar el producto de una manera más consciente y no dejaremos zonas sin cubrir (por el ansia viva que nos invade de meternos en el agua una vez que ya estamos frente al mar/piscina/pantano), lo segundo, porque el camino que recorremos hasta llegar al sitio elegido no suele ser un camino de rosas y sombras, más bien todo lo contrario, y claro, el sol ya nos está dando de lleno. Lo tercero, y creo más importante, el protector solar no es un escudo mágico que nos protege inmediatamente nada mas aplicarlo, necesita un tiempo para que sus filtros químicos penetren en la dermis y comiencen a actuar de manera eficaz (20-30 minutos).

Tampoco hay que olvidar repetir la aplicación del protector solar con cierta asiduidad (al menos una vez cada dos horas), teniendo en cuenta el fototipo, hora del día y numero de baños disfrutados.

Si tienes dudas sobre cuál es el mejor protector para según qué tipo de piel, acércate a nuestro centro de confianza Paula Díaz, te sabremos aconsejar con buen criterio, es más, lo haremos encantados.

Sigue estos pequeños consejos y cuida tu piel como si se tratase de la única que tienes, ¡que lo es!

 

by Elena Vaquero