Ya estamos en esas fechas en las que toca decorar la casa, comprar regalos, comer, comer y comer. Porque todos quieren hacer su propia comida o cena de Navidad: la empresa, los amigos, tus otros amigos, la familia y, si eres popular, igual tienes hasta más.
Además, lo bueno y a la vez lo malo de estas típicas comidas navideñas es que todos hacen despliegue de sus mejores dotes culinarias. Lo que significa que todo va a estar probablemente buenísimo, pero que también te va a hacer engordar.
Aquí te vamos a dejar una serie de consejos para resistir la tentación o, si terminas por sucumbir, qué alimentos son los mejores para ti y cuáles los peores. La media para engordar en estas fechas son dos kilos, quizás no es mucho, pero si quieres evitarlo te contamos varias formas para que puedas seguir disfrutando de las comidas sin ganar peso.
DULCES… COMO QUE NO
Empecemos por el mayor causante de que puedas ganar peso estas Navidades, desequilibrando el ritmo y las costumbres de las comidas. Los típicos dulces navideños están llenos de puro azúcar y grasas saturadas. Lo mejor es evitarlos, y si sabes que no vas a poder porque es superior a ti, cómpralos sin azúcar o su versión light. Si te niegas porque no saben igual de bien, deberías saber que hay algunos que engordan más que otros. Te los ponemos por orden, de los que más deberías ignorar a los que puedes pecar de vez en cuando. Obviamente no es un orden exacto al 100%, ya que los dulces varían según la marca o quién los haya preparado.
- Polvorones
- Turrón
- Bombones
- Mazapán
- Galletas
- Panettone
- Roscón de Reyes
BUENO, SOLO UNA COPITA
Ya sabemos que con las grandes comidas también es posible que venga alguna copita de más. Que si el vino para acompañar, el champán para un brindis, venga una copa o dos para la sobremesa, y claro, al final todos son risas. ¡Pues mal hecho! Porque al día siguiente ya no te ríes tanto y encima es fatal para tu cuerpo. Evita el alcohol, pero si sabes que vas a beber, intenta diluirlo con agua o hielo, no con refrescos que al final es azúcar que te puedes ahorrar y que encima hace que absorbas el alcohol más rápidamente.
Si al final terminas ignorando todo esto y bebes más de lo que deberías haber bebido, lo mejor es beber mucho agua al día siguiente y comer alimentos que contengan mucho líquido, frutas y verduras. La vitamina C y las vitaminas del grupo B también te vendrán bien. Sobre todo evita tomar alimentos con azúcar o salados tras ese día de tantas risas.
SIN PASARSE CON LOS ENTRANTES
La clave para los entrantes es que sean ligeros y lo más saludables posible. En el caso de que no seas tú quien se encargue de prepararlos, trata simplemente de no abusar. Recuerda que luego viene el plato principal, a ver si te vas a llenar antes de tiempo.
Intenta comer siempre sentada, que al ser los entrantes te puedes olvidar de esto e ir picoteando de un lado a otro mientras vas charlando con todo el mundo. Dejas de ser consciente de lo que estas comiendo y terminas comiendo más de lo que creías, más rápido y sin masticar bien, lo que provoca que el cuerpo tenga que trabajar el doble para hacer la digestión.
EL PLATO FUERTE
Es muy importante que comas lo que comas intentes servirte solo lo que verdaderamente vas a comer. No te sirvas de más, porque es la comida de navidad y va a estar todo bueno, y tu plato va a acabar vacío sí o sí.
Lo mismo ocurre a la hora de cocinar. No te pases con las cantidades que luego puede ser una tentación; e intenta cocinar los alimentos al horno, a la plancha, cocidos o al vapor.
Si no quieres atiborrarte, también está bien que bebas un vaso de agua antes de la comida para ir preparando al cuerpo. Te ayudará a saciarte antes.
El plato principal ideal debería consistir en un balance adecuado de proteínas (pavo, pollo o pescado) y de fibra (verduras, a ser posible antioxidantes). Evitar las salsas y los alimentos rebozados o empanados. No abuses de féculas (cereales, legumbres, tubérculos o algunas frutas y verduras) y tampoco mezcles de dos tipos por ejemplo arroz, patatas y pan.
Si no sabes con seguridad que es lo que vas a tener para la gran cena, también deberías tratar de no comer féculas a lo largo del día ya que proporcionan saciedad y tardan mucho en digerirse. Así te reservas para la cena.
LOS POSTRES, UN LIGERO FINAL
Por lo general el postre del día a día suele ser algo bastante simple, pero claro, en estas fechas nos venimos arriba y para fardar tendemos a preparar algo más elaborado.
Puedes comer postre, no te agobies, pero no elijas algo pesado y calórico como una tarta. Siempre tienes la opción de tomar algo más ligero que sea además igual de rico que el resto de la cena (porque siendo realistas nadie quiere terminar la cena de Navidad con una manzana).
Los mejores postres para tu comida Navidad serían las gelatinas, mousses, sorbetes o una mezcla variadas de frutas.
¿Y PARA EL RESTO DE COMIDAS?
Si a pesar de todo terminas comiendo de más durante alguna comida que otra es importante equilibrar y compensar con el resto de comidas.
Aunque hayas comido mucho en alguna comida es importante que no te saltes el resto de comidas, solo intenta hacer las comidas más ligeras. No rompas tus hábitos ni horarios, porque no va a hacer que adelgaces antes ni va a compensar el atracón del día anterior.
Para evitar digestiones pesadas en los días posteriores a uno de los banquetes navideños, es necesario eliminar el azúcar totalmente de nuestra dieta. Tomar infusiones te puede ayudar también en esta tarea, sobre todo combinaciones de menta-poleo, hierbaluisa, anís, hinojo o comino.
Los postres para tus comidas ordinarias durante estas fechas también deberían ser muy ligeros si no quieres coger kilos. Por ejemplo un yogur, que te ayudará con la digestión, o frutas como la papaya y la piña, que son bajas en calorías y además te ayudarán a saciar tu apetito.
Mientras comas no te pongas a ver la TV, el móvil o el ordenador. Te distraes del mismo modo que cuando estas de charla y vas a seguir comiendo a pesar de haberte saciado, y encima se tiende a masticar menos y más rápido.
No te olvides de que los paseos después de comer son una genial opción si quieres adelgazar. Además puedes aprovechar ahora que tendrás a tu familia y amigos cerca para que te acompañen.
Y por último, el consejo más importante para estas fechas: come, disfruta y aprovecha para divertirte y estar con la gente que más quieres.
